EDITORIAL
Recepción incrementada, pero baja
aceptación de trabajos: un análisis
de sus causas en el año que termina.
Invest Clin 62 (4): 291-293, 2021 https://doi.org/10.22209/IC.v62n4a00
Termina el año 2021 e Investigación
Clínica exhibe un aumento de más del 50%
en la recepción de trabajos, en comparación
con el año anterior. Este incremento proba-
blemente se deba a que nuestra revista es de
fácil acceso para la recepción de contribu-
ciones; basta con seguir las “Instrucciones
para los Autores” al escribir el artículo, en-
viarlo en un archivo Word y una vez conside-
rado apto para publicación, se exige un cum-
plimiento estricto de las normas.
Otro aspecto a considerar, es que Inves-
tigación Clínica acepta trabajos de diversa
índole, clínica y experimental, lo que amplía
el espectro de recepción. En el Comité Edi-
torial evitamos atenernos a temas de moda,
olvidando aspectos de patologías de obser-
vancia permanente. De hecho, este año los
trabajos sobre la pandemia COVID-19 han
copado las revistas científicas y se espera un
incremento, tal vez coyuntural, de los “índi-
ces de impacto” de aquellas que hayan publi-
cado más trabajos sobre el tema, ello debido
a la cantidad de citaciones a que esta situa-
ción conduce. Investigación Clínica, en su
afán de mantener su estilo amplio y diverso,
no se ha dejado arrastrar por este fenómeno,
consciente del peligro de bajar el índice de
impacto; sin embargo, en este año hemos
publicado 8 trabajos sobre el tema, incluidos
los de un suplemento con contribuciones de
científicos venezolanos.
Lamentablemente, el incremento de
las contribuciones logrado por la Revista,
también se ha traducido en un aumento en
el porcentaje de trabajos rechazados, cerca-
no al 60%. Esto nos ha llevado a analizar las
probables causas de este fenómeno y hemos
encontrado algunas que pueden haber influi-
do. Por ejemplo, la mayoría de los trabajos,
a pesar de considerar un número muy im-
portante de casos, se basan en análisis re-
trospectivos de hasta 10 años atrás, en los
cuales la metodología utilizada no se con-
sidera idónea para el momento actual o no
fue la más adecuada para el estudio clínico
o experimental realizado o los resultados no
tuvieron la interpretación correcta y no es
posible enmendar el problema, ello aunado
a falta de sustentación en los conceptos y un
conocimiento muy pobre del idioma inglés.
Otros aspectos negativos fueron análisis
estadísticos deficientes y discusiones poco
ajustadas a los resultados, con conclusiones
no acordes con lo obtenido. Por último, las
referencias muchas veces estaban limitadas
a revistas regionales, por lo que se carecía de
una discusión más universal.
Los tiempos de arbitraje y posterior pu-
blicación siguen siendo algo extensos. Ello
es debido a que hemos extremado el cuidado
al revisar la identidad de los autores y su ac-
tividad científica previa, así como al escoger
árbitros expertos en el campo objeto de es-
tudio con origen geográfico diverso. Además
debemos confirmar que las observaciones de
los árbitros fueron cumplidas a cabalidad.
Por otro lado, este año hemos sido afortuna-
dos en haber agregado una buena cantidad
de revisores iberoamericanos, expertos en
variados campos de investigación científica,
muchos de ellos provenientes de la diáspo-